La pastafrola es sin lugar a dudas, parte de la historia argentina. La receta de esta tarta artesanal a pasado de generación en generación durante décadas, teniendo su origen en Italia, donde fue creada por las religiosas del Monasterio de San Gregorio Armeno en Nápoles.
¿Por qué se llama pastafrola?
El término con el que se denomina viene del italiano “frolla” que en español significa quebrada, es decir, es una masa que se rompe en cuanto se corta o se manipula un poco. El origen de esta masa proviene de otro postre italiano llamado “crostata” que es una tarta cuyos bordes están rellenos de mermelada, aunque también se puede encontrar rellena de trozos de frutas y crema pastelera.
Comunmente, la pastafrola se hace con relleno de membrillo, pero se pueden encontrar variantes de dulce de batata y guayaba. Esta tarta dulce también es muy conocida en Paraguay y Uruguay.
Esta receta de pastafrola rellena de membrillo es fácil de hacer. Te dejamos a continuación el paso a paso de la receta de Osvaldo Gross para que puedas hacerla en casa.
Receta para hacer Pasta Frola en casa
Ingredientes:
Preparación:
Colocá la manteca pomada junto con el azúcar y batí enérgicamente con una cuchara de madera o batidor hasta blanquear la preparación.
Agregá la esencia de vainilla y la ralladura de limón.
Añadí los huevos y bate nuevamente hasta obtener una crema.
Tamiza la harina con la sal y el polvo leudante y hacemos una corona. Colocá la crema en el centro y une los componentes sin amasar (Podemos hacerlo con la ayuda de dos espátulas o bien con las manos tratando de no transmitirles mucho calor).
Fresá la masa una o dos veces hasta homogeneizar.
Forma un cuadrado y cubrilo con film y llevalo a la heladera a enfriar (La masa se puede conservar hasta 3 días en heladera o 2 meses en freezer).
Para el relleno, cortá el dulce en cubos, calentá junto con el agua y el vino a fuego suave. Remové hasta lograr una pasta. Luego, dejala enfriar antes de armar la tarta.
Para el armado, estirá tres cuartas partes de la masa con la ayuda de un palote hasta lograr unos 5 mm de espesor.
Luego, forrá una tartera de 26 a 28 cm diámetros. Apretá ligeramente la masa sobre los bordes de la tartera y cortá el excedente que vas a reservar para usarlo más adelante.
Uní la masa sobrante y estirala hasta lograr 5 mm de espesor. Cortalo en bandas de 2 cm de largo. Pincelalas con huevo batido.
Rellená la tarta con el dulce de membrillo y alisa el relleno. Realizá un enrejado con las tiras de masa por encima del relleno.
Horneamos a 180°C durante 45 Minutos
Dejala enfriar y serví.
Ingredientes
Preparación
Colocá la manteca pomada junto con el azúcar y batí enérgicamente con una cuchara de madera o batidor hasta blanquear la preparación.
Agregá la esencia de vainilla y la ralladura de limón.
Añadí los huevos y bate nuevamente hasta obtener una crema.
Tamiza la harina con la sal y el polvo leudante y hacemos una corona. Colocá la crema en el centro y une los componentes sin amasar (Podemos hacerlo con la ayuda de dos espátulas o bien con las manos tratando de no transmitirles mucho calor).
Fresá la masa una o dos veces hasta homogeneizar.
Forma un cuadrado y cubrilo con film y llevalo a la heladera a enfriar (La masa se puede conservar hasta 3 días en heladera o 2 meses en freezer).
Para el relleno, cortá el dulce en cubos, calentá junto con el agua y el vino a fuego suave. Remové hasta lograr una pasta. Luego, dejala enfriar antes de armar la tarta.
Para el armado, estirá tres cuartas partes de la masa con la ayuda de un palote hasta lograr unos 5 mm de espesor.
Luego, forrá una tartera de 26 a 28 cm diámetros. Apretá ligeramente la masa sobre los bordes de la tartera y cortá el excedente que vas a reservar para usarlo más adelante.
Uní la masa sobrante y estirala hasta lograr 5 mm de espesor. Cortalo en bandas de 2 cm de largo. Pincelalas con huevo batido.
Rellená la tarta con el dulce de membrillo y alisa el relleno. Realizá un enrejado con las tiras de masa por encima del relleno.
Horneamos a 180°C durante 45 Minutos
Dejala enfriar y serví.
Notes
Luego de graduarse de Licenciado en Geoquímica, completó su formación culinaria en Argentina, Italia, Francia, Alemania y EEUU. De vuelta en su país, comenzó su prestigiosa carrera como docente en numerosas escuelas, exposiciones, congresos y ferias, donde educó a miles de jóvenes pasteleros. Gross llegó a El Gourmet en 2008, donde millones de televidentes latinoamericanos lo reconocen como una de las figuras más queridas y consultadas de la señal.